La naturaleza de los dioses -publicado ya en esta colección-, La adivinación y El destino fueron concebidos por Cicerón (106-43 a.C.) como una suerte de trilogía "teológica" en la que el pensador y político romano examina las posibilidades de la existencia de la divinidad desde unas posiciones que toman siempre en consideración, bien para admitirlos, bien para rechazarlos, los argumentos del estoicismo. La adivinación constituye un intento de preservar la tradición ritual y religiosa que fue fundamento secular del estado romano frente a la avalancha de nuevas creencias y usos religiosos provenientes de pueblos ajenos. El destino examina este concepto y explora en él un equilibrio entre determinismo y libre arbitrio. Completa el volumen la traducción parcial del diálogo platónico Timeo, que despertó en él desde joven su atención por su interés cosmológico, pero también moral y político.
Traducción e introducciones de Ángel Escobar