Los nietos de un anciano comerciante del barrio antiguo de El Cairo se distancian de la tutela familiar y se comprometen con diferentes opciones políticas en el convulso Egipto de los años treinta y cuarenta, desde el comunismo al fundamentalismo islámico. Frente al desencanto de la generación anterior, estos jóvenes encarnan la vitalidad de una nación que, liberándose del dominio colonial, afronta con valentía su contradictorio futuro.