Fernando García de Cortázar hace cómplices a todos los españoles de un pasado que no por plural deja de ser común. Además de los reyes, conquistadores y políticos, también se asoman a estas páginas los españoles derrotados, los heterodoxos y los exiliados. Hoy, después de una transición y tantos años, la historia de España ya no es la crónica de un fracaso.