Cuando se habla del matrimonio como algo sagrado, mucha gente se imagina que el sexo de las parejas casadas tiene que ser aburrido, sin fantasía, ni diversión.
Ksawery Knotz, un sacerdote católico de Cracovia, en Polonia, quiere aportar su granito de arena para que esto cambie. Con este libro ha querido acabar con los tabúes y asegurar a las parejas católicas que una buena relación sexual es parte de un buen matrimonio.
«Lo más importante es comprender que la sexualidad no tiene por qué desviarnos de la religiosidad ni de la fe católica; que se puede conjugar la espiritualidad y la búsqueda de Dios con una vida sexual feliz» asegura Knotz, sin dudar.