La novela cuenta el debate interno de un maestro al que se le exige que eduque moralmente a sus alumnos para la guerra. Araque la la esencia misma de la dictadura, nuestra victoria personal de anteponer la moralidad a la tendencia generalizada a adaptarse de manera oportunista al fascismo.
El protagonista, un humanista activo, hace frente al totalitarismo sin que al final le importe el perder su empleo ni su puesto en la sociedad. Es testigo de la del embrutecimiento generalizado de la sociedad, cuyo índice es el comportamiento fascista de su propia clase escolar.
La cinta blanca, de Michael Haneke, mejor película europea del año, versa sobre el mismo asunto: las raíces de la intolerancia en la Alemania anterior al estallido de la II guerra mundial.