Nos rodeamos de objetos ordinarios que nos hacen la vida más cómoda y sin embargo, raramente nos preguntamos por su procedencia y significado.
Pongamos por ejemplo una simple bolsa. ¿Por qué las mujeres llevan bolsas mientras que a los hombres les cabe todo en el bolsillo? ¿Por qué preferimos dar la bolsa que la vida? Y si la bolsa cae, ¿podemos recogerla?
Este libro explora cuál es nuestra relación con los objetos y la forma con la que éstos van conformando nuestra realidad cotidiana a través del lenguaje y la cultura. Objetos mundanos que cobran vida más allá de su función.
Gafas, cepillos, cartas, llaves, enchufes o dulces. El autor se embarca en una apasionante senda histórica, filosófica y lingüística que nos permitirá entender estos objetos desde una perspectiva amplia y enriquecedora.