Con tono poético y tenuemente melancólico, Monte Sinaí narra el periodo que el autor pasó en un hospital neoyorquino a causa de una dolencia cardíaca.
Una obra de lenguaje vivo y sutil que reflexiona sobre la fragilidad de la condición humana y la cercana proximidad de la muerte, sin caer en el pesimismo y la afectación, antes bien con un mensaje optimista que permite conocer la trayectoria vital más reciente de José Luis Sampedro.