Jerez de la Frontera, 1752: en el tribunal se celebra un juicio por unos terribles asesinatos cuyo desarrollo tiene en vilo a toda la ciudad.
Nadie duda de la culpabilidad del acusado, un muchacho huérfano y sin ningún apoyo... excepto el del «abogado de pobres», pagado por el concejo, el joven Pedro Alemán y Camacho.
Idealista, pero también acosado por sus debilidades y limitaciones, Pedro viene de asombrar a los jerezanos con la impactante resolución de algunos casos que parecían perdidos.
Ante el reto más importante de su carrera, ¿conseguirá el abogado que la justicia impere?
Con una pericia narrativa admirable, Juan Pedro Cosano compone un relato que nos transporta a una época y circunstancias apasionantes.