Londrés, 1841. Wild Boy es un bicho raro con el cuerpo completamente cubierto de pelo a quién todos vienen a ver a la parada de monstruos del circo. Aunque, desde su cautiverio, él también mira a sus visitantes: es su única distracción. De hecho, el chico ha desarrollado unas técnicas de observación y deducción propias del mismísimo Sherlock Holmes. Así que, cuando es injustamente acusado de asesinato, Wild Boy se ve obligado a actuar. Por suerte, no está solo: la desafiante y atrevida Clarissa se convertirá en la perfecta compañera en esta difícil investigación.