Gwendolen Chawcer es una solterona octogenaria que vive entregada a la lectura y a la fantasía de un viejo amor, pero tan melancólica y plácida existencia se ve alterada cuando decide alquilar la planta de arriba de la mansión familiar en el barrio de Notting Hill. Su nuevo arrendatario, Mix Cellini, es un mecánico de máquinas de fitness con una fijación: los crímenes cometidos sesenta años antes por el tristemente célebre John Christie. Gwendolen no tarda en descubrir tan siniestra obsesión, pero ignora que ésta adquirirá tintes cada vez más macabros cuando Mix se enamore perdidamente de la modelo Nerissa Nash.
Con Trece escalones, Ruth Rendell presenta un retrato perturbador de dos personajes dispares pero hermanados por sus neurosis románticas. De paso, la gran dama de la novela de suspense psicológico incide en temas tan espinosos como el culto al crimen o las ansias de celebridad en nuestra sociedad.