La máscara, el maquillaje que reformula las identidades: José Donoso ha buscado siempre en sus relatos, obsesivamente, ese otro rostro posible de los seres y las cosas.
El lugar sin límites juega eficazmente con la dualidad de los sexos #la Manuela# en un prostíbulo de pueblo, especie de infierno anodino donde confluyen no sólo las pasiones eróticas, sino además los sórdidos juegos de poder y dominación que suelen marcar los territorios degradados.
Metáfora de la postergación y el encierro, esta novela muestra una marginalidad contra la cual el doble filo de las apariencias parece la única estrategia posible, aunque signifique tentar a la muerte.