Pilar Duaygües Nebot tiene apenas catorce años, vive con sus hermanas y sus padres en Barcelona: su vida se reparte entre los estudios y los juegos, las obligaciones hogareñas, los sueños casi infantiles sobre el amor, el despertar de una vocación y la ilusión de las vacaciones en un pueblo de Valencia.
Pero todo se resquebraja el 18 de julio de 1936 cuando se subleva el ejército y se desata la Guerra Civil.
Inquieta, sensible, día a día Pilar registra todo lo que sucede a su alrededor. Con una encantadora candidez pone voz a los conflictos propios de una adolescente: el sabor agridulce de las primeras amistades, la tortuosa búsqueda de la identidad, el descubrimiento del amor, la preocupación por el futuro, los placeres sencillos como la lectura, los bailes o el cine. Y todo ello bajo los bombardeos y las levas, el racionamiento y el hambre, que se agravan a medida que se alarga el conflicto, la ciudad en ruinas, la añoranza por personas que no se sabe si han sobrevivido, como una hermana miliciana, o amigos y familiares caídos en combate.