He advertido no sólo la ignorancia que existe acerca de la situación presente sino también los prejuicios que lastran la imagen de Cataluña y de España y, por lo tanto, de lo que está pasando, sus antecedentes y la forma en que ven y viven los acontecimientos las personas directamente implicadas, tanto los partidarios de la independencia como los que se oponen a ella. También he comprobado que muchos de estos prejuicios y tergiversaciones dan origen a buena parte de las ideas predominantes.
La pretensión de poder aportar algunas clarificaciones me ha llevado a escribir este texto. No lo he escrito para posicionarme en un bando o en otro. Lo he escrito para tratar de comprender lo que está pasando.