Analiza tu consumo · Reflexiona Gasta solo en aquello que realmente te aporta · Márcate objetivos claros · Ahorra cuanto puedas
Kakebo fue un método inventado por las autoridades japonesas en la posguerra para ayudar a los ciudadanos a gestionar inteligentemente el dinero, y, poco a poco, ha ido popularizándose alrededor del mundo, convirtiéndose en un fenómeno en países como Italia. El secreto es su simpleza y efectividad.
Se trata de pensar conscientemente en cada uno de nuestros gastos –su categoría, utilidad, necesidad– y establecer estrategias de ahorro a largo plazo.