Kullervo el Desdichado, como Tolkien lo llamaba, es un niño huérfano sin fortuna alguna, con poderes sobrenaturales pero marcado por un destino trágico. Educado en la granja del oscuro mago Untamo, Kullervo estaría solo en el mundo si no fuera por el amor de Wanona, su hermana gemela, y por la protección de los poderes mágicos de Musti, el perro negro. Kullervo es vendido como esclavo y jura vengarse del mago, pero cuando está a punto de llevar a cabo la venganza se da cuenta de que no puede escapar al más cruel de los destinos.
Tolkien armó que La historia de Kullervo fue «el germen de mis intentos de escribir leyendas propias» y que constituía «uno de los temas principales en las leyendas de la Primera Edad». De hecho, Kullervo es el precursor de Túrin Turambar, el trágico héroe incestuoso de Los hijos de Húrin.