Un clásico de la literatura de viajes.
«Todos necesitamos un reto que nos sirva como excusa para vivir», decía Bruce Chatwin, «y para el viajero esa excusa reside en cualquier sueño». Aquí el acicate para el sueño y para el viaje es un trozo de piel de brontosaurio entregado a su abuela como regalo de bodas. Atraído irremisiblemente por ese pedazo de leyenda, un día el joven Chatwin decidió dejarlo todo para emprender un viaje a través de la Patagonia, esa extensión de tierra, lejana e invisible, en el extremo antártico de América del Sur.
Repleto de descripciones evocadoras y anécdotas inolvidables, en este libro Chatwin parte en busca de vestigios de siglos de historia y de las insólitas huellas de personajes improbables, exiliados y excéntricos de toda especie, vagabundos y descendientes de vagabundos, hombres y mujeres encallados en el tiempo que dan una extraordinaria vivacidad a este libro espléndido, a este clásico de ayer y de hoy.
«Mientras tengamos sus libros, unas botas y un destino (¡y una Moleskine!), Chatwin seguirá con nosotros.» JACINTO ANTÓN, El País