Este libro trata de explicar los grandes perfiles históricos del siglo XX desde una perspectiva económica y social.
Testigo de la revolución proletaria y del nacimiento y fin del comunismo y del fascismo, el nuestro es un periodo determinante en la historia humana: explicar este enigma es el desafío al que el libro de Gabriel Tortella pretende responder, tratando de ir más allá de la mera descripción, para desentrañar los mecanismos de la moderna evolución social. Encuadernación: Rústica.
El siglo XX ha sido justamente llamado el siglo de los extremos: ha producido los progresos más maravillosos junto a los crímenes colectivos más abominables. Es el siglo de la democracia, pero también del totalitarismo. Es el siglo de Einstein, de Flemming, de Barnard y de Curie, pero también de Hitler, de Stalin, de Idi Amin, de Saddam Hussein y de Milosevic. Es el siglo de la exploración espacial, de los ordenadores, de la electrónica, de la aviación, pero también de la bomba atómica, de los misiles intercontinentales y de las dos guerras mundiales. Es el siglo de la medicina gratuita, del seguro de desempleo, de las grandes ciudades, del alargamiento de la vida humana, pero también el siglo de los campos de concentración, del genocidio y de la agresión contra la naturaleza. Es el siglo del crecimiento económico y del desarrollo humano, pero también de la Gran Depresión, de la inflación y de las desigualdades.
Comparado con épocas anteriores, el siglo XX presenta una acumulación tal de acontecimientos sin precedentes que bien puede decirse que ha sido un periodo único en la historia de la Humanidad. Un siglo que comienza con un fuerte impulso globalizador termina, después de decenios de intentos de autarquía, de divisiones en bloques y de guerras calientes y frías, con otro impulso globalizador aún más fuerte.
¿Pueden explicarse estos contrastes y estos acontecimientos?¿Por qué nos ha tocado vivir en este siglo de los extremos? En La revolución del siglo XX, Gabriel Tortella trata de dar respuesta a estas preguntas y de guiar al lector a través del laberinto histórico que es el siglo XX, en la convicción de que este aparente galimatías tiene explicación racional, de que comprendiendo el siglo XX nos comprenderemos mejor a nosotros mismos y de que esta comprensión será una ayuda para entrever las tendencias del siglo XX.