En la Francia medieval, el duque Geoffroy de Charny ha hecho uso de su maléfica inteligencia para pergeñar un plan que le asegurará la gloria y el poder. Dominado por la ambición, se propone revivir el carácter milagroso del Santo Sudario, la perfecta excusa que justifique la construcción de una iglesia para su propio provecho. Mientras tanto, su hija Christine va a protagonizar junto al joven monje Aurelio una tormentosa historia de amor. Oponiéndose a los planes de su padre y dejando al desnudo la licenciosa vida de los conventos, Christine organiza una revuelta religiosa. Juntos fundan una ciudad tan perfecta como efímera, donde la libertad, el amor y el sexo luchan por encontrar un destino.